Cámaras y centrales frigoríficas en la industria cárnica
La industria cárnica es una de las más importantes en nuestro país. Por este motivo, es necesario mantener siempre un elevado nivel de higiene y conservación de alimentos para cumplir con las Leyes, que están sujetas a unas grandes exigencias.
Esto es debido a que un pequeño fallo en la conservación puede hacer que el resto de alimentos se contagien y provoque consecuencias fatales para los consumidores, como enfermedades o malestares.
Para que esto no suceda, es necesario invertir es sistema de refrigeración y congelación, como las cámaras frigoríficas, donde se pueden almacenar alimentos sin que su calidad sea mermada.
Si llevas tiempo pensando en mejorar el control de la carne fresca, es necesario contar con los mejores profesionales para que puedan aconsejarte y ayudarte a conseguir tus objetivos.
¿Qué importancia tienen los sistemas de conservación?
Para la conservación de la carne, es necesario que los sistemas de las cámaras frigoríficas se encuentren en las mejores condiciones posible, de este modo, los alimentos pueden conservar sus propiedades y encontrarse en las mejores condiciones posibles para el consumidor final.
El frío es el encargado de que no hagan su aparición los temidos patógenos, motivo por el que es necesario vigilarlo regularmente y que la cámara se encuentre en óptimas condiciones de limpieza y desinfección.
¿Cómo se realiza la conservación y el almacenamiento de la carne fresca?
Para que la carne se pueda considerar fresca, es necesario que exista un control de la temperatura y la humedad, en caso contrario, se deterioraría y diferentes microorganismos la invadirían, perjudicando su calidad e higiene.
El simple hecho de reducir la temperatura en 10ºC hace que las bacterias se reduzcan a la mitad. También es la temperatura óptima para que el punto de congelación no avance. Es decir, se mantiene fresca, pero sin llegar a congelarse.
Al realizar la conservación de la carne por medio del enfriamiento, es necesario que se haga lo más rápido posible después de la matanza del animal, independientemente de cuál sea el destino final de esa carne (consumo propio o venta).
En el caso de que vaya a venderse, es necesario seguir la cadena de frío para conservarla en las mejores condiciones posibles, es decir, desde que se obtiene la carne hasta que llega al consumidor final.
¿Cuál es la temperatura indicada para que la carne se mantenga fresca?
La temperatura indicada para que la carne se pueda considerar fresca en su almacenamiento, gira en torno al punto de congelación: -1ºC. En el caso del tocino, debido a que tiene grandes cantidades de sal, la temperatura será de -3ºC.