El diseño de una cámara frigorífica - Doorfrig

La importancia del diseño en un almacén frigorífico

¿Nunca te has preguntado por el diseño de los almacenes y las cámaras frigoríficas? El diseño previo es muy importante puesto que se encarga de planificar la distribución del mismo para que guarde una serie de parámetros de comodidad, hermeticidad, sencillez, etcétera. En este artículo te desvelamos por qué es tan importante un buen diseño de una cámara frigorífica.

Un almacén frigorífico es un sistema complejo y muy acotado que tiene asociados una serie de parámetros de diseño parecidos, como si de un almacén normal se tratase, pero con criterios propios.

La particularidad y lo que le diferencia de los almacenes normales principalmente es el frío, por lo que las propiedades aislantes tendrán una mayor importancia en esta cámara frigorífica y, sobre todo, los aparatos necesarios para mantener a todo el almacén refrigerando a la temperatura deseada.

Para empezar, uno de los aspectos que hay que tratar con prioridad es la seguridad del mismo y la que pueden tener los empleados. Las puertas frigoríficas siempre tienen que poder abrirse desde dentro para que nadie pueda quedarse atrapado por accidente. Si se han diseñado de forma incorrecta o se ha cometido algún error las puertas cámaras frigoríficas pueden ser una trampa mortal.

Teniendo en cuenta este aspecto, hay que empezar a valorar la distribución del interior y el espacio que vamos a dejar para la maniobrabilidad de los operarios. Es importante determinar esto con anterioridad porque la capacidad de refrigeración tendrá que ser mayor o menor en función del tamaño.

Atendiendo a los costes del mismo lo ideal es diseñarlo en base a la capacidad que creamos necesitar, puesto que todo lo que sobre será perder dinero. Además, es necesario también medir el espacio del que disponemos para la construcción y de los recursos de los que disponga el cliente.

El diseño del interior

Como hemos dicho antes, hay que tener en cuenta el espacio que vamos a dejar para maniobrar y los lugares en donde vamos a poder almacenar las mercancías. Se podrá calcular ya no solo la capacidad necesaria para aclimatar la estancia así como la carga máxima en un día caluroso. Esto último es importante puesto que puede llegar a calentar el ambiente y estropear la temperatura del mismo. Todo esto tiene que saberse de antemano para saber el límite y funcionalidad del mismo.

Una vez se haya calculado y pormenorizado todo puede trabajarse ya en la distribución de los diferentes compresores de refrigeración y calcular la potencia necesaria para mantenerlo siempre en su estado óptimo. De esta manera, lo mejor para diseñar un almacén frigorífico es conocer de primera mano el uso que se pretende dar del mismo así como el espacio, puesto que de esa forma las variables de refrigeración cambiarán tanto en un sentido como en otro.

El diseño es una de las partes más importantes a la hora de crear un almacén frigorífico, cuantas más variables controles y calcules menos margen de error tendrás y más difícil será equivocarte. Si este artículo te ha parecido interesante y quieres contactar con nosotros no lo dudes ¡Resolveremos todas tus dudas!